Abstract
O’Keefe y Nadel (1978) consideran que un mapa cognitivo es una representación del entorno en la que se incluye toda la información disponible respecto a los puntos de referencia y sus relaciones espaciales. Una vez formado el mapa cognitivo, los animales pueden utilizar cualquier subconjunto de puntos de referencia para localizar una meta. El experimento que se presenta pretende analizar si efectivamente un mapa cognitivo incluye toda la información del medio o sólo la información que es más relevante para localizar una meta invisible. Para este objetivo se entrenó a dos grupos de ratas a localizar una plataforma invisible ubicada en una piscina de Morris. Uno de los grupos disponía de cuatro puntos de referencia (A, B, C, D) mientras que el segundo grupo aprendió la tarea en presencia de dos puntos de referencia (C, D). Después del entrenamiento, ambos grupos se sometieron a una prueba en la que se les permitía nadar en la piscina con sólo dos puntos de referencia (C, D) y sin la plataforma. Los resultados mostraron que el grupo que siempre había tenido dos claves presentes permaneció más tiempo en el área de la plataforma que los animales que habían sido entrenados con cuatro puntos de referencia y se pusieron a prueba con dos. Estos resultados se interpretan como un indicio de ensombrecimiento espacial entre claves ubicadas alrededor de la piscina, y se discuten a la luz de las teorías asociativas del aprendizaje